La (mala) Educación en Canarias

IUC cree que ha llegado el momento de que este Gobierno y su Consejera de Educación asuman sus responsabilidades por la penosa situación de la Educación Pública.

IUC recuerda a esta Consejera que invertir en Educación evita lastres personales, profesionales y sociales no solo a esta generación sino a sus descendientes. La EDUCACIÓN PÚBLICA no es un gasto sino una inversión de futuro.

Luis Brito, en una entrevista publicada hoy en Diario de Avisos, asevera que las “protestas de estos tres años no han afectado a la calidad educativa” como si fueran el origen y no la consecuencia de un sinfín de despropósitos en su gestión: reducción constante de presupuestos en la última década pese a los alarmantes índices de fracaso escolar (el doble de la media europea), pésima gestión de las listas de sustituciones (que ha propiciado que se eleve de quince días a un mes los tiempos de sustitución, elevación de ratios alumnado/docente, disminución de los proyectos de mejora, recortes de ciclos formativos medios y superiores…

IUC no ve “normal” el funcionamiento del sistema público educativo canario, como afirma la Consejera y entiende y apoya tanto las protestas de profesionales de la educación como de las familias, usuarias y, por tanto, conocedoras de sus ventajas y también de sus deficiencias.

Desde luego no es “normal” que las familias tengan que estar recordándole a la Consejería el derecho a la Educación de sus hijas e hijos, porque lleven más de un mes sin profesorado.

No es “normal” que un Plan de Sustituciones Cortas supla una baja por más de una semana, y especialmente cuando se sabe que esa baja va a ser larga, con informes de la Inspección Médica en la mano, sobrecargando al profesorado del centro y en detrimento del alumnado.

IUC recuerda que la reducción de presupuestos en educación se produjo precisamente en el capítulo 1, donde se incluyen las partidas de nóminas de los sustitutos. Por qué no da datos sobre la contratación de sustitutos: porque se ha reducido drásticamente a costa del sobreesfuerzo del profesorado y el derecho a la Educación del alumnado. No es cierto que estas partidas puedan ampliarse cuántas veces sea necesario, ya que el capítulo 1 requiere de una justificación pormenorizada para su ampliación. De hecho, los primeros borradores del curso próximo prevén ratios superiores y desaparición de unidades en Colegios Públicos precisamente para ajustar y cumplir con el Presupuesto.

IUC valora positivamente el trabajo y compromiso de los profesionales de la Educación así como la implicación de las Familias en los Centros (especialmente de las AMPAs) que hacen posible que el “milagro” de la Educación Pública en Canarias sea una realidad (más del 75% del alumnado, casi la totalidad del alumnado con dificultades de aprendizaje, extranjero y con dificultades socioeconómicas) y tenga buenos resultados. Sin embargo, todo tiene un límite y sin una apuesta decidida del Gobierno por la Escuela Pública, con una mayor inversión, la brecha en la sociedad canaria será aún mayor.

IUC no ve “normal” que el índice de fracaso escolar en Canarias esté todavía a más de un 35% (por encima de la media nacional y duplicando la europea) y no es casual que Canarias tenga la tasa de paro más alta de España y que además seamos de los primeros en número de personas por debajo del umbral de la pobreza.