IUC afirma estar "ilegalizada de facto"

Izquierda Unida Canaria afirma sentirse objeto de una especie de “ilegalización de facto”, al constatar que las leyes electorales hacen que los votos de sus votantes valgan mucho menos que los de los demás. IUC afirma que es necesario tomar conciencia de que no estamos en un sistema democrático y, a partir de tal diagnóstico, abogar por la refundación democrática del Estado. La política económica y la excepcionalidad de la crisis española no pueden explicarse sin las trampas electorales.

IUC afirma que la dictadura de Franco fue bastante torpe al ilegalizar al Partido Comunista y que el régimen semiautoritario actual es mucho más hábil porque, mientras ilegaliza de facto a Izquierda Unida, aparenta ser democrático y legítimo.

Para IUC, más inteligente que ilegalizar a un partido es lograr que sus votos valgan menos. En las elecciones municipales y autonómicas de 2007, PP y PSOE obtuvieron seis veces más votos que IU y doce veces más concejales. En las últimas elecciones generales, si a PSOE y PP cada diputado le hubiera costado los mismos votos que a IU, habrían sacado 23 y 21 escaños respectivamente, en vez de 169 y 154.

Si un dictador inventara un sistema electoral como el español, quitándole valor al voto de los opositores, todo el mundo diría que es fraudulento. Sin embargo, aplicamos un doble rasero cuando, bajo una apariencia democrática, persisten unas reglas del juego impuestas bajo amenaza golpista.