La red de municipios registra en el Congreso con el apoyo de IU la moción suscrita por sus ayuntamientos para avanzar hacia la tercera república

La diputada Monserrat Muñoz critica la "exaltación de la monarquía" que se está haciendo con la excusa del cumpleaños del Rey

La Red de Municipios y Cargos Públicos por la Tercera República registró hoy en el Congreso de los Diputados una moción en la que abogan por la instauración del Estado federal republicano y por el impulso para abrir en estos momentos un debate profundo sobre el modelo de Estado.

El primer consistorio en aprobar en pleno la moción fue el de Casariche, al que siguieron otros tres sevillanos (Marinaleda, Martín de la Jara y Pedrera), cinco malagueños (Arriate, El Borge, El Burgo, Humilladero, Teba), uno de Cádiz (Alcalá del Valle), otro de Córdoba (Espejo) y, el último, de Madrid (Casarrubuelos). Esta es la iniciativa que trajeron al Congreso como "herramienta" para avanzar en la "construcción" de la República.

Los alcaldes y cargos públicos desplazados al Parlamento estuvieron acompañados por el parlamentario autonómico andaluz de IU Antonio Romero, que coordina el proyecto, y contaron con el respaldo de la diputada nacional de IU Monserrat Muñoz.

Esta iniciativa tuvo su origen en la presentación, el 26 de julio de 2007, ante el Parlamento andaluz de una moción por la cual se pretende incluir la "lucha democrática por la República en la agenda política, social e institucional".

Muñoz explicó que, por principio democrático, Izquierda Unida no comprende que "por razones de sangre alguien pueda tener la jefatura del Estado". Según explicó, el objetivo es avanzar a hacia una República federal, de clara raíz popular, laica y en la que la prioridad sea mejorar la vida de los trabajadores y que, además, recoja "lo mejor de la Segunda República española".

La pretensión de esta iniciativa es también la de fomentar un "debate sereno, tranquilo y pacífico" sobre el modelo de Estado en el que todos los ciudadanos puedan participar y que no se quede en una discusión académica o entre políticos.

Esta moción, dijo Muñoz "es un acierto", sobre todo en un momento en que contemplamos "atónitos" cómo "en torno a un cumpleaños que es una fiesta privada, se hace una exaltación de la monarquía que no corresponde ni al momento político, ni a las prioridades de nuestro país".

Por su parte, Antonio Romero insistió en que "hay un déficit democrático en España" que se puede solucionar avanzando hacia la implantación un modelo republicano. En este sentido, dijo que "la Constitución española no son las Tablas de le Ley" y puede ser reformada.

Abogó también por abrir "un debate sereno" sobre los cambios y aseguró que "tan legítimo" es pretender una revisión del modelo de Estado consagrado en la Carta Magna, como impulsar las limitadas reformas que pretenden el PP y el PSOE del texto constitucional. "No se trata de quemar fotografías", ha declarado Romero, sino de aprobar una "asignatura pendiente" de forma pacífica para que los ciudadanos españoles puedan pronunciarse sobre el modelo de Estado que prefieren, con lo que se superaría el "déficit democrático" del país.

Para Romero, la excusa del cumpleaños del Rey ha dado lugar a una "propaganda desmedida" y en esto, "como en las siete y media, tan malo es pasarse como no llegar, y con tanta publicidad nos estamos pasando siete pueblos". Se mostró convencido de que "más pronto que tarde se instaurará la República", porque "queremos ser ciudadanos y no súbditos".

Tanto Muñoz como Romero afirmaron que IU está dispuesta a dar la batalla por la restauración de la República y explicaron que, además de conseguir la adhesión de otros ayuntamientos, también impulsarán el apoyo de los ciudadanos al Manifiesto por la Tercera República, que ya han firmado políticos y personajes sociales destacados, entre ellos Rosa Regás, Luis García Montero, José Manuel Martín Médem, así como avanzar en la organización de jornadas y seminarios que promuevan el debate.

Romero criticó al PSOE por su "republicanismo de salón", en referencia a las "instrucciones" dadas a los ediles socialistas por parte del presidente andaluz, Manuel Chaves, y del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, para no votar la moción de IU.